domingo, 2 de octubre de 2016

Tatemae V.S Honne




Japón bien podría ser conocido como la Nación de la Hipocresía. No,no,no, ni se me confundan ni se me enojen, ahora les explico a qué me refiero, y esto es a las filosofías que rigen su pensar y diario vivir. Y cuando las vayan conociendo a fondo, verán que Japón sí que podría ser llamada la nación de la hipocresía y de la mentira de paso, sin embargo ambas carentes de la gran carga de málica que las acompaña en occidente.

Y para esto tenemos unas palabras clave el día de hoy: HONNE Y TATEMAE.

¿Qué es el HONNE? El Honne se refiere a tus verdaderos sentimientos y deseos, los cuales pueden ser muy diferentes a lo que se espera o necesita de ti. Razón por la cual en lo general las personas mantienen su Honne oculto del mundo y lo revelan sólo a amigos muy cercanos o familia.

Más claramente el Honne es tu verdadero yo.

¿Qué es el TATEMAE? TATEMAE literalmente significa “Fachada” y se refiere a la conducta y opiniones que uno demuestra en público. Y que es lo que se espera o necesita de ti como persona, de acuerdo a las circunstancias, posición o momento en concreto en que te desenvuelves. Y puede o NO coincidir con tu honne. Y se usa para evitar conflictos u ofender a otra persona.

Más coloquialmente hablando, el Tatemae es el yo que se espera de ti.

Por ejemplo, en el trabajo, aparte del uniforme de trabajo también te van a incluir una personalidad, que es la que vas a usar en el trabajo, tal cual usas tu uniforme. Porque tu verdadera personalidad ni importa ni mucho menos es requerida.

Es muy común que el Tatemae se utilice en ámbitos laborales, pues se espera que para que una compañía funcione, todos deben convivir en armonía, razón por la cual se crea una personalidad GENERAL que todos los empleados deben usar. El individualismo no va con el Tatemae, en pocas palabras, es más de la mente colmena que guía a la sociedad, pero llevada a lo que bien podríamos llamar realidad aumentada.

En pocas palabras el Tatemae es: Una mentira maquillada de realidad.

Más hipocresía pero con otro nombre.

En el Tatemae no hay más personalidad que la requerida. Ejemplo: Si un día tu llegas al trabajo sintiéndote del nabo, y alguien te pregunta ¿Cómo estás?, la respuesta que se espera de ti es “Muy bien gracias” y la cara de alegría, aunque te estés muriendo, porque no puedes llegar diciendo “De la chi”#%$” y no porque sea una palabrota, sino porque no es no lo que te pide el Tatemae. No es la personalidad que debes usar en el trabajo, en el trabajo tu tatemae (o fachada) debe ser la de un sonriente trabajador felíz que cual androide, no se enferma, no se enoja, no odia, no ama, no siente, es simplemente el epitome de la serenidad (sin importar tus verdaderos sentimientos).


Los personajes al fondo, están mostrando su Honne, y podemos ver la incomodidad del chico porque su compañero no muestra el tatemae. Mientras quienes están al frente, muestran su Tatemae, lo que es bien visto.



Otro ejemplo: Puedes haberte peleado a los golpes la noche anterior en un bar con un compañero de trabajo, pero al siguiente día, en el trabajo, ese mismo compañero te va a sonreír y portarse como si nada hubiera pasado, aunque por dentro te quiera matar.




Y lo que es peor es que la línea divisoria entre el Tatemae y el Honne se considera en Japón de suma importancia. De hecho, los Nihonjinron (especialistas en la cultura japonesa) afirman con rotundidad que el hecho de que en el idioma japonés existan palabras específicas para denominar estas conductas, revela la tremenda complejidad de la cultura y protocolo japonés.

En Japón, recuerden, LA MENTE COLMENA  es lo que importa.

Razón por la cual existen filosofías y conceptos como el Omoiyari, Omotenashi, Tatemae, Honne, entre otros, todos condicionantes de tus acciones y reacciones. El pensamiento libre en Japón es más una fantasía que raya en el tabu.

Lo que ves en Japón y tomas por realidad, no es más que un cristal holográfico del que están conscientes todos los japoneses pero no el resto del mundo, y que son los pilares de su perfecta sociedad.

Y esto es algo con lo que chocan de frente y sin freno los extranjeros, dándose el cristalazo de su vida (incluidas las cortadas con los vidrios) y topándose luego del trancazo, con la realidad, la auténtica realidad. Los que es causa de las constantes decepciones que se llevan los extranjeros que llegan a vivir en Japón.




El Tatemae y la amistad

La amistad en Japón, o lo que tú crees que es amistad, en más del 99,9% de los casos (y sin exagerar ni un poco) no es más que Tatemae y algo de Omoiyari, que NO es lo mismo que amistad. Y en otros casos esa supuesta amistad que te fingen, es simple interés por algo que se necesite de ti, ya sea practicar un idioma, presumir del amigo extranjero como si de un bolso de marca cara se tratase, e incluso en el caso de las chicas, usar al hombre para viajar al país de este y tener guía que la cuide, etc.

Sé que mucha gente va a comentar, “oye no, es que yo tengo un amigo japonés por correo y me quiere mucho ha sido mi amigo por años, practicamos el inglés” … Ah… ya salió el peine. Lo que le interesa de ti es practicar su inglés, cosa muy llamativa en Japón y que poca oportunidad tienen de practicar con su gente, precisamente porque temen mostrar su honne, quizá su pronunciación no es muy buena, y por eso es mejor practicarla con un extranjero que no los va a juzgar, ya que en Japón se espera y valora mucho la perfección.

Pero a la hora que tú quieras a tu AMIGO fuera del relajo y la práctica, cuando desees hablar de tus problemas, lo verás desaparecer, porque el no está ahí para oír tus problemas, porque en realidad, no son amigos, o eso es lo que él o ella pensarán. Y no entenderán que te moleste el hecho de que ellos te dieran la espalda.

A esas personas occidentales que juran tener un amigo japonés, les recomiendo investigar sobre el Honne y la amistad en Japón, para que se den cuenta que los japoneses difícilmente intiman lo suficiente con alguien para demostrar su honne y considerarle amigo. Esto es algo extremadamente importante para ellos, así que no intimaran más que con 4 o 5 personas a lo largo de toda su vida. No digo que no exista alguien que de verdad tenga la suerte de tener un verdadero amigo japonés, pero créanme, son contados. Cuando un japonés te entrega de verdad, PERO DE VERDAD, su amistad, será un excelente amigo, pero, para que le den su amistad de verdad a un extranjero, está en sanscrito…

Oh también está el que me dirá, “Yo conozco un japonés que vive aquí en mi país y somos amigos, se porta casi como mexicano, venezolano, colombiano” etc. ¿Quieres conocer a tu amigo de verdad? Llévalo a Japón, acompáñalo a Japón y lo verás dar un cambio total de más de 180 grados. Porque los japoneses en el extranjero son unos, pero en Japón son otros. Lo mismo si tienes un novio, si lo quieres conocer de verdad, acompáñalo a Japón, mínimo una semana, míralo caer en esa transformación brutal y en más del 90% de los casos, una vez conocerlo ya no querrás ni pensar en cosas como el matrimonio.

Da la casualidad que los japoneses son transformer de primer nivel, se transforman cuando los sacas de Japón, como que entran en modalidad “Experimental”.

¿Y porque se da esto?, por una palabra; REPRESION, la sociedad japonesa es en extremo represiva, así que cuando ven un poco de libertad sacan a relucir comportamientos y personalidades que ni ellos mismos habían experimentado, son como unos niños a quienes se les permite entrar en una obra de teatro en la que pueden elegir el papel que ellos quieran (aunque no entiendan ni de qué se trata). Pero, cuando regresan Japón, es como si volvieran a lo que ellos consideran la realidad y dejan el juego de lado.

Esta represión continua en todos los aspectos que ejerce sobre su gente la sociedad japonesa es lo que crea gente como los hikikomori, por mencionar un ejemplo.

Para los japoneses, es muy importante mantener la armonía, en todos los ámbitos, pero es tal la importancia de la armonía, que no importa sacrificar los propios sentimientos o derechos, con tal de conservarla, llevando esto a extremos nada saludables.

En Japón jamás podrás creen en las sonrisas, y mucho menos siendo extranjero, porque aparte de sus propias reglas de comportamiento, se agrega el “protocolo para con los extranjeros” el cual se basa en los estereotipos que se tienen de occidente.


Los occidentales son divertidos.
Los occidentales no son gente seria
Los occidentales son caballeros con las muejeres
Las occidentales son mujeres fáciles

V.S los conceptos japoneses

En la vida hay que tener seriedad
El exceso de diversión no es buena
El hombre es primero
La mujer debe ser pura en todos los ámbitos (y eso incluye ser casi una tonta, entre menos sepas de la vida mejor, no hablamos sólo de sexo sino de todos los ámbitos, ya que el hombre japonés idealiza a una mujer a la que él pueda educar y proteger)



Y eso degenera en comportamientos tatemae específicos para tratar con los extranjeros.

“Los occidentales sonríen mucho”… Ok entonces hay que sonreír, pero ¿por qué sonríen los occidentales? No lo sé, pero hay que sonreír.

“Los occidentales son caballerosos con la mujer” pero ¿Cuál es la razón de esa caballerosidad? ¿Qué la inició?, no tengo idea, pero hay que aceptarla. ¿Por qué? Porque así es la cosa y punto.

“Los occidentales son muy amigueros” ah ok, vamos a jugar a ser amigueros, pero, ¿qué conlleva ser amigo de un occidental? ¿Por qué son tan amigueros? No lo sé, sólo sé que ellos lo hacen, así que para verme igual que ellos, lo hago.

Ahora ¿Se espera algo de una amistad tan fácil de conseguir? Según la concepción japonesa: “No, una amistad tan fácil es sólo un juego OBVIAMENTE, porque nadie puede ser amigo de alguien tan rápido”

En Japón sépanlo y grábenselo, hacer amistad con alguien, amistad de verdad, lleva AÑOS, y no es broma.

No son pocos los equívocos que suscita el Tatemae japonés en los foráneos, porque estos toman por ciertos y sinceros ciertos comportamientos cuya única pretensión es seguir la línea establecida de las cosas.

Nunca se esperará de ti otra cosa que no sea el tatemae preestablecido en el ámbito en que te desenvuelves, y cada ámbito tiene su propio tatemae,(escuela, trabajo, calle, restaurant, etc) que hay que respetar y seguir a pie juntillas. Si se te ocurre hacer algo fuera de lo preestablecido, por mucha razón que tengas, será mal visto por todos cuantos te rodean.

El tatemae se puede encontrar hasta en las cosas más pequeñas, como probar un dulce extranjero (un reto muy de moda en el internet) tristemente algo que en lo particular me parecía muy exasperante de los japoneses, es que JAMAS DE LOS JAMASES vas a sacarles una respuesta sincera, siempre usaran el tatemae para decir cosas corteses, llegando  incluso a caer en absurdos evidentes tal como decir que el yogurt cortado que les acabas de dar “sabe muy bueno” con tal de no ofenderte. Pueden estar haciendo una cara de morita agridulce, pero te dirán “esto está muy bueno”…

Lo mismo en las encuestas, jamás dicen lo que realmente piensan sino lo que se espera de ellos.
A mí me llegó a tocar, yo les preguntaba que opinaban de México, que les gustaba y que no, y les decía que hablaran con toda la confianza del mundo, pero me topaba con pared… solo me decían lo que les gustaba, pero nunca me decían lo que no (aunque yo lo sabía muy bien). Cuando la situación me forzaba a hacer la pregunta más directa tal como “¿qué piensan ustedes de la inseguridad que se vive en México?” me daban respuestas incoherentes tales como “Pero México tiene cosas bonitas, tiene unas playas hermosas” (que sí, lo que es Cancún y la rivera maya son muy conocidas en Japón). Y yo insistía con la pregunta y al final después de insistir me decían “pero no es tan malo, yo creo que está bien”

Está... bien?... XD….

Y es ahí donde te das cuenta que se esfuerzan mucho por ser corteses en todo momento haciendo de la hipocresía su arma más poderosa, pero más exasperante también… Llevan la hipocresía a un nuevo y más alto nivel.

Las chicas por ejemplo sufren con eso porque sus amigas jamás les dirán “te ves muy mal con ese vestido, cambiate”, no, ellas creen preferible que su amiga haga el ridículo y sea la burla de la fiesta, antes que decirle la verdad porque según ellas, la verdad, es poco cortes y hasta hiriente… Y ¿no resulta más hiriente que todo mundo la bullé en la fiesta?

En la tremenda gran mayoría de los casos lo que recibirás de los japoneses será sólo y únicamente Tatemae a tu favor, cosa que los occidentales confunden con amistad, amabilidad o cariño, pero que en realidad carece de sentimiento ulterior, es sólo un comportamiento preestablecido que pretende ser cortes, pero está vacío. Y los occidentales no lo entienden y de hecho no lo quieren entender pues prefieren creer que es una realidad porque así les conviene a sus sentimientos  o ego.

Lo pondré en un ejemplo de occidente. Ya les he hablado que en Japón no es bien visto sonreír porque para ellos eso es un símbolo de que tienes sentimientos hacia la persona a quien sonríes y en la mayoría de los casos con miras al matrimonio, porque sí, esto es realidad entre los japoneses, pero sólo entre ellos. Sin embargo cuando un extranjero, digamos un Latino va a Japón, y sonríe todo el tiempo como le es costumbre, todo el mundo pensara que esa chica o chico latino está perdidamente enamorada/o de ellos y se sentirán en la necesidad de romper tu corazón y advertirte que a pesar que los halagas ellos ni tienen interés en ti así que debes dejarlos en paz…

Y tú vas a montar en ira porque no sólo pensarás que son unos tremendos arrogantes estúpidos que se creen que tienen tanta suerte como para que tú te fijes en ellos, sino que además te ofenderá sobre manera que ellos hayan tenido la osadía de afirmar tal cosa en tu cara sin siquiera preguntarte primero para tener una confirmación de sus suposiciones, pues es lo más lógico que tu como occidental hubieras hecho. Y te vas a molestar y ofender con justa razón, y dirás “Ignorantes, ¿qué caso no ven que provengo de otra cultura? ¿No piensan que mi gente tiene comportamientos diferentes? ¿No les entra eso en la cabeza?”

Pues no. Pero es lo mismo que ellos piensan cuando, al usar tatemae contigo, tú juras que ya SON LOS MEJORES AMIGOS. Pero la realidad es que así como para nosotros sonreír todo el tiempo es una costumbre social, para ellos lo es el tatemae, y no implica que haya sentimientos envueltos en su uso.

La realidad es que sólo están siendo amables, pero jamás afectivos, es ahí donde vienen las grandes decepciones.

Yo me llevé unas enormes, pero de verdad, ENORMES decepciones, de gente que yo creía mis amigos y gente que yo creía me tenía cariño o aprecio, pero todo fue siempre, simplemente una fachada, Tatemae.

Mis maestros por ejemplo, todos creíamos que nos tenían aprecio, les mandábamos mails con dudas o simplemente con felicitaciones por sus cumpleaños o día del maestro y los contestaban con ánimo y alegría, pero cuando dejábamos la escuela y le mandábamos un e-mail para saludarlos, resultaba que o nunca respondían, o respondían de formas frías que te hacían sentir bastante mal. Pero ¿por qué? porque simplemente ya no éramos parte de la escuela, así que ya no había necesidad de aplicar el tatemae con nosotros.

Cuando los llegábamos a encontrar en las convenciones repartiendo folletos de la escuela y los saludábamos, ellos se portaban confundidos, fríos, o en algunos casos hasta un poco molestos, en un principio creíamos que era porque estaban ocupados repartiendo volantes y les quitábamos tiempo, luego entre más conocimos la cultura japonesa, nos dimos cuenta de que, era porque como no estábamos en el ámbito escolar, es decir literalmente no estábamos en la escuela sino en una expo, y así no tenían por qué entrar en su Tatemae escolar.

Para ellos era: “No estamos dentro de la escuela, por lo tanto no soy tu maestro aquí, por lo tanto ¿por qué me saludas tan efusivamente si aquí no somos nada?”

Triste pero cierto, debido a que estaban en un país extranjero, algunos maestros, algunas veces trataban de fingir una cierta alegría al vernos, pero muy mal actuada… Fueron contados los maestros muy campechanos que sí se adaptaron al país, y sacaron al japonés loco que llevaban dentro y nos recibían con una autentica alegría los encontráramos donde los encontráramos.

Pero, de estas trasformaciones, en Japón se ponía peor la cosa.

Había una sempai muy agradable, sonriente y amiguera en la escuela, que en el tiempo que vivió en México era muy divertida y accesible, y resulta que la volvimos a encontrar en Japón cuando viajamos en grupo, pero, estaba irreconocible, su actitud era totalmente diferente, quisimos saludarla pero no sólo se mostró apenada de que la vieran hablar con nosotros, sino que no hallaba como zafarse de nosotros, y ni siquiera la estábamos atosigando, simplemente le preguntamos dos cosas, cómo había estado y qué había hecho en este tiempo en Japón.

Luego la maestra con la que vivía me explicó que su comportamiento se debía a que en Japón no suelen darse platicas casuales en medio de la callé, y que ella no entendía el porqué la habíamos detenido, y mucho menos no siendo amigos.

Ya que para la senpai, los amigos con los que había salido en México no eran amigos, sino simplemente personas con las que había pasado ratos agradables en el extranjero pero nada más.

Y cuando digo que en Japón no se dan pláticas casuales, por platicas casuales me refiero a que de repente te cruces en la calle con alguien y le quieras hacer platica. Si vas con esa persona desde un principio (salir a tomar el café o algo así) no hay problema de ir charlando por la calle, pero sí es repentino, no lo entenderán, porque como les dije en otra entrada, lo espontaneo no es bien visto en Japón.

Los únicos con los que esto no ocurre son los japoneses que gustan más del extranjero y se adaptan con facilidad a otras costumbres, porque tienen ese deseo de salir del canon japonés. Como la maestra que tan amablemente me tuvo de huésped en su casa el tiempo que viví en Japón, pero como ella hay muy pocos. Ella me explico que ella era considerada una japonesa rara dentro de su sociedad.

Y son los llamados japoneses raros los que de verdad están dispuestos a entender tu cultura y aceptarte a ti, pero repito son MUY POCOS Y DIFÍCILES DE ENCONTRAR.

En Japón incluso se tiene por costumbre sonreír cuando estas molesto  o en desacuerdo con alguien por eso las sonrisas son tan desconcertantes en Japón para un extranjero.

Puedes ver a dos chicas platicando y una de ellas sonreír de pronto, pero aunque no lo creas, lo más probables es que esté en desacuerdo con lo que le acaban de decir y esa es su forma de demostrarlo.
Incluso hay japoneses que se quejan de eso, ya que nunca pueden confiar en las opiniones o felicitaciones que reciben de otros. Porque siempre son tatemae, algo que ellos mismos saben, es sólo una mentira.

Así que, ¿Resulta difícil y confuso vivir en Japón? Más de lo que te puede imaginar. Sin embargo los japoneses creen con certeza absoluta que el tatemae es algo necesario para poder vivir la vida bien y sin problemas.

Algo que chocaría con occidente donde se cree que la hipocresía y la mentira se debe usar sólo en la medida de los necesario bajo su modalidad de diplomacia, pero nunca más allá, ya que llevarla por bandera todo el tiempo sería incluso peligroso para la buena salud mental.

Pero incluso los japoneses mismos aceptan que el tatemae es, en pocas palabras, una mentira “Pero no es una mentira mala”, es lo que nos dicen, “Mentimos para no herir a la otra persona y así poder tener una bonita relación con ella”. Y para acabar pronto, esto dicho por varios japoneses “En el 99% de los casos sólo conocerás el tatemae. Recuérdenlo bien”

Y si tú mi querido lector piensas ir a vivir a Japón, tendrás que estar consiente que no sólo tendrás que adaptarte a estos dos conceptos el Honne y el Tatemae, que son base fundamental (te gusten  o no) sino a otros tantos por el estilo, que terminarán por borrar tu verdadera personalidad, al menos por el tiempo que radiques en Japón, y que te darán una nueva “fachada” que tendrás que usar sí o sí.

Sin embargo siendo justos, sé que nada de lo aquí leído nos gusta o parece, pero, es su cultura, y si tú vas hacia ella tendrás que respetarla, y apegarte  a las costumbres.

Sí, quizá cuando ellos van a otra cultura no la saben respetar desde el punto de vista que todo lo siguen juzgando al estilo japonés, pero no lo hacen con malicia, es que no saben pensar de otra forma, así los construyeron, por decirlo de algún modo, nunca se les permitió expandirse (ni mental, ni sentimental, ni emocionalmente) más allá de lo establecido y les resulta casi imposible cambiarlo dentro de sí mismos. Para ellos no hay más que lo aprendido en Japón. Y si tú conociendo lo raros que son en tu tierra, quieres ir a meterte a Japón, lo llevas claro…

Se dice que los japoneses tienen 3 caras, y ellos mismos admiten que tal cosa es real.

Una de ellas es el Tatemae: La cara que le muestran a todo el mundo y que siempre será una mentira.

El Honne: Que es una realidad, tu verdadera cara y que sólo tus amigos cercanos y tu familia conocen.

Y la tercera es Daredemo Misenai Kao: La cara que no le muestras a NADIE. Algo que sólo la persona conoce y que se lleva a la tumba.




El Honne, la amistad y los sentimientos

Estos van siempre de la mano y son siempre muy difíciles de ver, como el elusivo jaguar de la selva Lacandona.

De hecho el Hon de Hon-ne, proviene de la palabra “Hontou” que significa verdadero, es tu yo verdadero, el que siente, el que ama, el que piensa, el tú de verdad. Pero que en el 99% de las situaciones, no es requerido, y no encaja con la sociedad prestablecida.

Para los japoneses es tan importante su yo verdadero, quizá porque es algo que no les está permitido ser por las reglas de su sociedad, que se vuelve algo sagrado para ellos. Pues su yo verdadero, es algo que además de seguro va contra lo prestablecido, por ende altamente criticable, cosa que puede resultar muy muy hiriente, por lo tanto, sólo se mostrarán tal cual son en un ámbito donde se sientan 100% seguros, en este caso la familia, y para mostrarse tal cual son frente a otro individuo, este tendrá que ser merecedor de toda su confianza, alguien que sabe que aunque no es su familiar, no le juzgará y tratará de comprenderle. Razón por la cual, las amistad les toma años.

¿Por qué? porque nadie se abrirá con nadie que no conozca bien. Así que tímido + tímido = años para conocerse bien.

En Japón es muy común ver que hay gente que tiene más de 5 años de estarse tratando y apenas están comenzando a pensar seriamente a hacerse amigo uno del otro. Échenle otro año más para que esa amistad cuaje…

Así que ahora comprenderás que cualquier japonés que recién te conozca y se diga tu amigo, te está mintiendo. Y si fue por internet, olvídalo, aunque ya tengan más de 5 años de conocerse, es muy fácil fingirse amigo de alguien a quien no le vez la cara frente a frente y que por cuestiones de distancia no tienes que soportar del diario ni mucho menos mostrar tu verdadero yo a través de una pantalla. El internet te da la posibilidad de ser quien tú quieras frente a la webcam en la privacidad de tu habitación, donde puedes jugar el papel que mejor te convenga, ya que no tienes que enfrentar a la sociedad cuando juegas ese rol en la webcam.

Bien chicos espero les haya gustado la entrada y les sirva para comprender mejor a la sociedad japonesa y  saber en qué se están metiendo de verdad cuando de tratar con ellos va la cosa.


Espero sus comentarios al respecto y nos estamos leyendo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario